En un mundo donde los desafíos sociales y políticos son cada vez más complejos, la participación ciudadana se erige como um elemento fundamental para impulsionar el cambio social.
La crisis de representación en las democracias es un tema central en el debate político, lo que hace que la participación ciudadana se vuelva esencial.
La capacidad representativa de los partidos políticos ha sido cuestionada por varios autores en las últimas décadas, y los datos lo respaldan. En España la participación en las elecciones europeas de 2024 fue del 49,2%. En las elecciones nacionales la participación máxima se registró en 1982, cuando rozó el 80%. Una tendencia que también se extiende a diversas democracias consolidadas en otros países.
En Europa la ultraderecha cresce con excepción da Suécia y Filandia. ¿Estará la base de descontentamento a ser canalizada para una construcción sea ella utópica o de otra natureleza? ¿Qué opinas?
En el artículo de hoy, veremos que la confianza, al igual que en las relaciones personales, es un indicativo de vitalidad del sistema democrático y exploremos vías de participación ciudadana más allá del voto. Y aunque me salga la vena de politóloga, intentaré no ser muy pesada. 🙂
Participación ciudadana
El concepto de participación ciudadana surge cuando el ciudadano pasa de ser un simple espectador o súdbito a convertirse en un participante, ¡que demanda más y mejores servicios de sus gobernantes!
Autores como Putnam (1993), Lipset (1994), Boix y Posner (2000), y Tabellini (2013) confirmam que el capital social tiene efectos positivos en la calidad democrática. La participación democrática es un factor determinante para explicar la variación en la calidad democrática.
Según el Eurobarómetro 522 de diciembre de 2023, solo alrededor del 10% de los europeos está bastante satisfecha con la democracia. Las principales amenazas incluyen la desconfianza en relación a las instituciones democráticas, la falta de compromiso político y la falta de oportunidades para que los ciudadanos sean escuchados y participen activamente en la toma de decisiones.
Resulta interesante observar que en Dinamarca (72%) y Finlandia (70%), la confianza en el papel de los ciudadanos para salvaguardar la democracia es alta. Estos países también sobresalen en varios estudios por tener altos índices de calidad democrática.
Participación ciudadana: de la protesta a la acción
Alexei Navanly instaba a los rusos a dedicar 15 minutos de su día a la participación ciudadana. ¿Cuánto tiempo estás dispuesto/a a dedicar? ¿Y qué dice tu respuesta sobre ti?
Ser ciudadano va más allá de simplemente presentar la declaración de renta. Hay múltiples mecanismos que permiten a los ciudadanos ser defensores activos de sus derechos, en lugar de simples espectadores.
10 maneras de participar en tu entorno
1. Vibración alta
¿Conoces la escala de vibración o la frecuencia de las emociones del Dr. David Hawkins?
Según Hawkins, los niveles de conciencia van desde el nivel más bajo (verguenza) hasta el nivel más alto (iluminación) y cada nivel representa un estado de ser y una percepción del mundo. Aún su teoría y escala no sean aceptadas por la comunidad científica, Hawkins sugiere que la humanidad en su conjunto se beneficia cuando más individuos alcanzan niveles más altos de vibración.
(No se trata de reprimir las emociones ni de fomentar un pensamiento positivo tóxico, sino de las aceptarlas, transitarlas y integrarlas. El objectivo no es ser perfectos, sino de ser auténticos).
2. Votar
No tenemos dudas que la democracia tiene sus fallos y vicios; Churchill ya lo decía. Sin embargo, el voto sigue siendo la forma más directa de «accountability«, rendición de cuentas.
El primer sufragio universal masculino se estableció en Francia en 1848, eliminando restricciones basadas en propriedad. El sufragio para mujeres en Francia llegó mucho después, en 1944, casi 100 años más tarde.
Es importante conecer los hechos de la historia, tener presente lo mucho que significó la conquista de este derecho, y distinguir entre política y politiquería. Los politólogos hablan de política con criterio, a diferencia de muchos políticos.
3. Escribir en la hoja de reclamaciones
Sin comunicación no hay diálogo. No podemos esperar que los funcionarios defiendan nuestros derechos. Mi experiencia me dice que no es así; incluso fue ya chantajeada por un funcionario a instancias de su superior horas despúes de hacer una reclamación.
Es importante conocer nuestros derechos y presentar argumentos válidos y bien fundamentados, en lugar de simplemente quejarnos.
La «hoja de reclamaciones» es un documento oficial destinado a que los consumidores puedan expresar sus quejas o reclamaciones contra un establecimiento o servicio. Este documento está regulado por la normativa del consumo y es obligatorio que esté disponible en todos los establecimientos donde se presten servicios al público. Es un recurso fundamental para hacer valer nuestros derechos como ciudadanos y para lograr que las cosas avancen; de no ser así, no habría sido chantajeada.
4. Crear, firmar o compartir peticiones
Las peticiones son una poderosa herramienta de participación ciudadana para generar consciencia, movilizar apoyo y presionar por el cambio social y político. Según el artículo 29 de la Constitución y la Ley Orgánica 4/2001, pueden ejercerse de forma individual y colectiva para presentar sugerencias, iniciativas, información o solicitudes de intervención.
Los peticionarios podrán exigir la confidencialidad de sus datos. No se admitirán peticiones sobre asuntos que estén siendo objecto de un procedimiento parlamentario, administrativo o judicial en curso.
Todos los peticionarios tienen derecho a recibir una respuesta dentro de un plazo máximo de 3 meses a partir de la fecha de presentación
En España, los ayuntamientos generalmente no transmiten las peticiones o mociones presentadas por ciudadanos. Estas suelan ser transmitidas por partidos políticos o asociaciones. Es fundamental contar con asesoría jurídica para desarrollar estrategias fundamentadas, ya que cada caso es único.
5. Presentar una queja al Defensor del Pueblo
¿Conocías la figura del Defensor del Pueblo? Es elegido por el Congreso de los Diputados y el Senado, con una mayoría de tres quintos. Su mandado dura cinco años y ejerce sus funciones con autonomía.
Cualquier ciudadano puede acudir al Defensor del Pueblo y solicitar su intervención de forma gratuita para que investigue cualquer actuación presuntamente irregular de la Administración Pública española, ya sea central, autonómica o local, y de sus agentes.
Puedes presentar tu queja AQUÍ siempre que haya transcurido menos de un año desde el motivo de la queja.
6. Participar en presupuestos participativos
En 1989, en la ciudad de Porto Alegre, Brasil se llevó a cabo la primera experiencia de presupuestos participativos del mundo. Este modelo se expandió por varias ciudades brasileñas y por toda Latinoamérica. Llegó a España en 2001 con experiencias pioneras en Cabezas de San Juan, Rubí y Córdoba.
Estudios señalan que los presupuestos participativos se convierten en espacios de educación y aprendizaje tanto para ciudadanos como para técnicos y políticos. Sin embargo, también señalan la presencia de sesgos participativos, donde a menudo participan las mismas personas…
7. Escribir reseñas
¿Cuántas reseñas has escrito en Trustpilot u otras plataformas? Durante mi experiencia en atención al cliente para marcas reconocidas, a menudo nos enfrentábamos a amenazas de reseñas. Sin duda, las reseñas online son una herramienta poderosa para ejercer influencia.
8. Participar en Audiencias Públicas
Las audiencias públicas son un mecanismo importante de participación ciudadana. Permiten que los ciudadanos expresen sus puntos de vista, preocupaciones o sugerencias sobre políticas, proyectos de ley, regulaciones y otros asuntos de interés público.
Cada vez más ayuntamientos ofrecen la posibilidad de dejar preguntas o peticiones por escrito o de intervenir presencialmente en las audiencias.
9. Asociarse a una asociación, cooperativa o sindicato
La labor de los dirigentes asociativos es encomiable. Si hay una causa que te apasiona, considera unirte a alguna colectividad, grupo de consumo o banco de tiempo.
Participar en estas iniciativas fortalece la red social, fomenta el cambio social y te permitirá contribuir activamente a la construcción de lo que crees. En la era de las marcas personales, es esencial recordar el poder del colectivo.
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10. Formar parte de grupos de debate
Si has llegado hasta aquí. estás más que invitado a participar en un Design Sprint de Achiote. Nuestra intención es recrear las tertulias parisinas con un toque de modernidad. ¡No te lo pierdas!
Participar en grupos de debate no solo es beneficioso a nivel individual, sino que también contribuye al desarrollo colectivo de habilidades y al avance de soluciones creativas.
Participación ciudadana: Clave para el cambio social
En Achiote promovemos la participación ciudadana. Somos ante todo una red para personas, profesionales y empresas inconformistas y apasionados por el impacto, ¡de verdad!
Reconocemos el privilegio de acceso a estos mecanismos. ¿Cómo se sentiría una mujer que tenía ganas de votar pero no podía? ¿Cómo nos sentimos al saber que en muchas partes del mundo la participación ciudadana no son una opción?
En Achiote, estamos convencidos de que todos podemos contribuir al cambio social. ¿Te unes?